SÍ, ME LEVANTARÉ
El tiempo de Cuaresma es un “tiempo propicio” de conversión personal. Es un tiempo de "gracia".
No debería pasar la Cuaresma sin un encuentro con Dios y los hermanos en el sacramento de la reconciliación.
Bueno será, participar en la celebración de la Penitencia, para llegar reconciliados a la Pascua.
Su práctica externa, tanto individualmente como en comunidad, ha de ser el resultado de una conversión del corazón.
"El Señor no se cansa nunca de perdonar, somos nosotros los que nos olvidamos de pedirle perdón". (Papa Francisco)
La Parroquia te ofrece esta oportunidad de pedir COMUNITARIAMENTE perdón por nuestros pecados y los pecados de nuestra sociedad con absolución INDIVIDUAL.
Tienes una cita el VIERNE 31 de Marzo a las 8,00 de la tarde.
Después celebraremos la Eucaristía en acción de gracias.